Siempre hemos aconsejado a nuestros pacientes que las visitas rutinarias a su odontólogo deben ser 2 veces al año. En la boca, además de caries, inflamación de la encía y otras enfermedades orales, pueden surgir enfermedades más mortales como el cáncer oral. Los dentistas son los profesionales sanitarios que más cánceres de este tipo han detectado en los últimos años gracias a una simple exploración. Una visita a tu clínica dental podría salvarte la vida si estuvieras padeciendo un cáncer de este tipo.
La mayoría de los cánceres orales comienzan en las células planas que cubren la superficie de la boca, lengua y labios, sin embargo el cáncer oral se puede formar en cualquier parte de la boca. El cáncer bucal lo puede padecer cualquier tipo de persona, pero el riesgo es más alto en hombres, consumidores de tabaco, personas con VPH o con antecedentes de cáncer de cabeza o cuello. Las largas exposiciones al sol también pueden favorecer el riesgo de cáncer en el labio.
¿Cuáles son los síntomas de un cáncer oral? Cómo podemos saber si estamos en riesgo?
Hay ciertos síntomas, como los que enumeramos a continuación, que te pueden dar pistas, aunque en la mayoría de los casos son los dentistas quienes durante las visitas rutinarias de sus pacientes, han sido los que han dado la voz de aviso sobre esta enfermedad y son los que más han ayudado en la prevención del cáncer oral.
• Manchas blancas o rojas en el interior de la boca
• Llagas en la boca que no terminan de curarse
• Hemorragias en la boca
• Caída de dientes
• Problemas o dolor al tragar
• Bultos en el cuello
• Dolor de oído
En la mayoría de los casos es durante la visita cuando los dentistas detectan un cáncer oral. Con una exploración típica un dentista es capaz de divisar estos síntomas otorgándoles la importancia que realmente tienen. Si tras un examen encontraran signos de un posible cáncer bucal, habría que hacer otras pruebas para confirmar o descartar la posible enfermedad.
En los últimos años muchos odontólogos han optado por realizar preguntas más exhaustivas a sus pacientes con el fin de detectar problemas que pudieran derivar en un cáncer oral. El tratamiento temprano de este tipo de cánceres además es esencial para evitar que este se propague causando daños mayores.
Este tipo de cáncer, al estar en una zona tan visible como es la boca, es más fácil de detectar si se saben con antelación cuáles son los síntomas. Lo malo es que los síntomas son tan comunes que la gente que los padece no parece darles la importancia que realmente tienen. Hay pacientes que han tenido durante meses alguna llaga que no ha terminado de curarse sin que esto les haya parecido relevante o hayan pensado que podría tratarse de la antesala de un cáncer oral.
Como decimos, al estar un una zona tan visible, hacerse una exploración a uno mismo no es complicado. En dos minutos podemos valorar si deberíamos acudir a un profesional o no hay que preocuparse. Si tienes duda tras leer este artículo, colócate frente aun espejo y revisa los labios, el borde de la lengua y sus laterales moviéndola de un lado a otro. También hay que examinar el interior de las mejillas y ver si hay algún sangrado fuera de lo normal o algún bulto en la cavidad oral. Si ves algo anómalo, no dudes en visitar a un profesional lo antes posible. Recuerda que siempre es mejor prevenir que curar y en caso de darte cuenta cuando el problema ya está ahí, siempre es mejor reaccionar cuanto antes.