¿Qué pasa si dejamos de lavarnos los dientes?

 En el año 2010  el Consejo de Dentistas realizó una Encuesta sobre la Salud Bucodental de los Españoles y los datos de esta encuesta son, como poco, preocupantes.

Más del 10% no se cepillaba los dientes a diario y más de un 2% no se los cepillaba nunca.

Esta falta de costumbre en la higiene dental puede provocar graves consecuencias en nuestro cuerpo ya que la salud de nuestra boca es mucho más importante de lo que muchas personas puedan creer. Hay estudios que revelan que el estado de nuestras encías puede indicar que estamos padeciendo enfermedades o fallos en nuestro organismo, de ahí que no haya que mirar a otro lado cuando vemos un problema en nuestras encías.

Si pasamos 24horas sin cepillarnos los dientes y limpiar la lengua y encía, una fina capa de placa, es decir, bacterias, comienza a situarse en la parte exterior de nuestros dientes y si continuamos sin cepillárnoslos, además de estas bacterias, gérmenes y suciedad, se unirá el mal aliento por la falta de higiene.

Estas bacterias suelen adherirse en la zona de las encías y en los huecos interdentales, por este motivo, además de usar un cepillo de dientes también aconsejamos el uso de seda dental y cepillos interdentales para llegar a esas zonas a donde el cepillo no llega.

 

Si esta decisión de no lavarnos los dientes permanece  y continuamos una semana con la ausencia de una higiene bucal, esta acumulación de placa además de ser cada vez más gruesa, comienza a oler y por si fuera poco, se comienza a desarrollar la gingivitis, una enfermedad que afecta a las encías inflamándolas e irritándolas de tal forma que pueden sangrar si las tocamos. Además esa placa de la que hablamos, al hacerse más gruesa se convierte en sarro, y para deshacernos del sarro no bastaría con un cepillado, se debería acudir al dentista para acabar con él.

 

La cosa se va poniendo aún más seria si dejamos de lavarnos los dientes durante un mes. Las bacterias que tenemos ya en la boca comienzan un proceso de descomposición. Además de tener las encías rojas, doloridas e inflamadas, la probabilidad de tener una caries al comer dulces será mucho mayor. Si esto ocurre y no vamos de inmediato a la clínica dental, es muy posible que en lugar de solucionar el problema con un simple empaste, haya que recurrir a la endodoncia.

Si este habito de no lavarse los dientes continúa, además de comenzar a tener caries sin control, podemos empezar a perder algunas piezas. Si también es verdad que la genética y otros factores pueden potenciar o frenar este caos dental, la idea de abandonar la higiene dental no puede ser buena en ningún caso.

 

De pequeños nos enseñan a lavarnos los dientes mínimo 3 veces al día, una vez tras cada comida. Este hábito se va abandonando en la juventud, por falta de tiempo, por pasar el día fuera de casa sin tener un cepillo a mano y otros factores que en ningún momento deberían ser una excusa.

 

La higiene bucal es esencial si no queremos terminar perdiendo nuestras piezas dentales. Más vale prevenir que curar, por lo que si este artículo te ha parecido interesante, ayúdanos a compartirlo  para concienciar a la gente de la importancia de un buen cepillado después de cada comida.